El entorno es genial, con un jardín lleno de flores y árboles frutales. El desayuno es variado y sabroso, destacando la tarta casera. Ibrahim es un anfitrión increíble que te hace sentir como en casa.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara.

Jardín idílico con piscina, entorno tranquilo, vistas a las montañas

El agua caliente no estaba disponible a ciertas horas!!! Las habitaciones eran más pequeñas de lo esperado, además de que los muebles viejos necesitaban una renovación urgente. noté que había escasez de opciones de aparcamiento, lo que puede ser un verdadero inconveniente para quienes viajamos en coche. ¡Las escaleras son un verdadero reto para quienes tienen problemas de movilidad!!!

El ambiente entre los huéspedes es muy bueno.

La cama era extremadamente incómoda y se hundía en el centro, lo que provocó noches de mal sueño. Además, la falta de servicios de habitación hizo que la estancia se sintiera un poco desatendida. Un detalle más que no me agradó fue la falta de atención del gerente, ya que solo lo vi en el desayuno y no estaba disponible para resolver problemas.

La piscina era diminuta, apenas caben cuatro personas y ni un solo miembro del personal se preocupó por nuestra comodidad. Además, el desayuno pretendía ser un buffet, pero resultaba caótico. Casi escribo una buena crítica, pero. no pude.

Casa Jazmin es un rincón encantador. El jardín es espectacular y el desayuno está lleno de opciones saludables. A pesar de la falta de variedad un día, todo fue delicioso. Un lugar perfecto para desconectar y disfrutar de la tranquilidad. ¡Repetiría sin dudarlo!

Un oasis de tranquilidad

Casa Jazmin es un pequeño paraíso. El desayuno fue espectacular, lleno de sabores frescos. Disfrutamos de la compañía de otros huéspedes y de la serenidad del jardín por la noche.

El check-in fue algo tardío y la piscina necesitaba más atención, lo que afectó un poco nuestra experiencia. había un poco de ruido en la habitación por la luz que entraba.

Una opción inmejorable para una visita relámpago en Órgiva con una excelente relación calidad precio. El desayuno estaba muy rico, especialmente la tarta casera que cambiaban cada día. Si quieres tranquilidad, este lugar es ideal, aunque recuerda llevar tus propias toallas si eres muy exigente.

Este lugar me viene perfecto, siempre con wifi, un área para comer al aire libre y una piscina para relajarse. En mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar algo perdido, lo que recordaré siempre. Volveré para una escapada romántica.

El jardín, la piscina, los desayunos caseros y el ambiente acogedor fueron simplemente excepcionales.

La cama era incómoda, mientras que la limpieza de las habitaciones fue excelente.

Un rincón especial

La casa es pura tranquilidad, ideal para desconectar. El desayuno es riquísimo, sobre todo la tarta casera, todo fresco y delicioso. Ibrahim es un gran anfitrión, siempre atento. El único detalle es que la conexión wifi a veces fallaba. La ubicación es perfecta, cerca del pueblo y con unas vistas espectaculares.

Jardín hermoso, lleno de plantas y frutales. Desayuno fresco con mermelada casera y pan tostadito, delicioso. Ibrahim siempre atento y amable, se siente el buen rollo. Lugar ideal para desconectar y disfrutar, aunque el wifi falló un poco.

maravilloso, maravilloso, maravilloso

Cada rincón de esta casa es un jardín de ensueño lleno de plantas y árboles frutales. Disfrutamos de un desayuno delicioso al aire libre, mientras escuchábamos el sonido relajante de la fuente. Por la noche, la chimenea y las estrellas acompañaron nuestras conversaciones junto a la piscina, creando un ambiente mágico.

lo recomiendo encarecidamente ❤️🌟

La casa tiene un jardín precioso y la piscina es ideal para relajarse. Rosa fue muy atenta y amable, haciendo que la estancia se sintiera como en casa. Sin embargo, hubo algunos problemas con la conexión wifi en las habitaciones y la limpieza podría mejorar. Es una buena opción para una corta estancia y disfrutar de un buen desayuno.

la verdad fue genial, el jardín y la decoración son un pasote. el desayuno estaba brutal, lleno de sabor y frescura. Ibrahim es un crack, siempre pendiente de todo. la piscina está super chill y te relajas como un rey. la ubicación es top, al lado del pueblito y todo.

aunque el wifi a veces fallaba y no había televisión en la habitación, pero eso no fue un gran drama.